Mi búsqueda fotográfica siempre es intimista y estética.
Intento dibujar retratos a través de la luz, que se convierte en pinceladas, que puedan despertar en el espectador estados de ánimo, emociones y sensaciones a través de una estética pictórica y fotográfica.
Me interesa lograr un cuadro que sea a la vez una ventana que transporte al espectador a una historia, condensada en esa captura del instante que es la fotografía.
La fotografía, análoga al cuento como decía Cortázar, es un lenguaje que permite la magia de inventar y soñar, no solo la escena que se dibuja, sino también el antes y el después del instante capturado. Un instante que se vuelve acontecimiento y que, por lo tanto, aglutina miles de proyecciones significativas dentro de un relato posible.
Creo, además, que la mirada descansa y trasciende en la belleza, por lo tanto, mi fotografía se propone la confluencia de la historia mínima e individual con la belleza como necesidad vital.
Lo interior se vuelve apertura, puente y al mismo tiempo frontera.
Intento dibujar retratos a través de la luz, que se convierte en pinceladas, que puedan despertar en el espectador estados de ánimo, emociones y sensaciones a través de una estética pictórica y fotográfica.
Me interesa lograr un cuadro que sea a la vez una ventana que transporte al espectador a una historia, condensada en esa captura del instante que es la fotografía.
La fotografía, análoga al cuento como decía Cortázar, es un lenguaje que permite la magia de inventar y soñar, no solo la escena que se dibuja, sino también el antes y el después del instante capturado. Un instante que se vuelve acontecimiento y que, por lo tanto, aglutina miles de proyecciones significativas dentro de un relato posible.
Creo, además, que la mirada descansa y trasciende en la belleza, por lo tanto, mi fotografía se propone la confluencia de la historia mínima e individual con la belleza como necesidad vital.
Lo interior se vuelve apertura, puente y al mismo tiempo frontera.
Jorge Omar Gonzalez